CEO de Unity renuncia por la controversia de las tarifas de instalación

En respuesta a la polémica generada por las tarifas de instalación anunciadas y posteriormente retractadas, John Riccitiello ha decidido retirarse de sus cargos como presidente, CEO, presidente del consejo y miembro de la junta directiva de Unity de manera inmediata, según anunció la compañía.

Como medida provisional, James M. Whitehurst será designado CEO interino, presidente y miembro de la junta, mientras que Roelof Botha, director independiente principal de la junta de Unity, asumirá el cargo de presidente. La junta directiva iniciará un proceso de búsqueda para encontrar un CEO permanente.

Unity ha asegurado que Riccitiello continuará brindando asesoramiento a la empresa para garantizar una transición sin contratiempos. Aunque el anuncio de hoy no especifica las razones exactas de la renuncia de Riccitiello, en un comunicado él expresó que ha sido un privilegio liderar Unity durante casi una década y servir a los empleados, clientes, desarrolladores y socios, quienes han sido fundamentales para el crecimiento de la compañía.

La partida de Riccitiello se produce como consecuencia de la reacción negativa generada por las tarifas de instalación. El 12 de septiembre, Unity anunció una nueva tarifa de ejecución que implicaba que los desarrolladores pagaran una pequeña cantidad cuando alguien descargara un juego creado en su motor, siempre y cuando ese juego superara ciertos umbrales de ingresos y número de instalaciones. Sin embargo, esta medida fue ampliamente criticada por los desarrolladores y la comunidad de juegos, quienes consideraron retirar sus juegos debido a esta tarifa.

Unity intentó aclarar la política al día siguiente, argumentando que más del 90% de sus clientes no se verían afectados por este cambio. Sin embargo, esto no logró calmar a los usuarios, y finalmente, el 22 de septiembre, Unity dio marcha atrás en varios aspectos clave de la política, lo que mitigó en gran medida la reacción negativa. A pesar de ello, varios desarrolladores señalaron que Unity ya había perdido la confianza de la comunidad con su anuncio inicial.

La gestión de Riccitiello en Unity ha estado marcada por varios momentos controvertidos, incluyendo disculpas a los desarrolladores por sus comentarios sobre aquellos que no aceptan las microtransacciones. Riccitiello se unió a Unity en 2014 después de dejar su cargo como CEO en EA.

Aunque Unity sigue siendo uno de los motores más importantes junto con el Unreal Engine de Epic, impulsando juegos populares como Pokémon Go, Hollow Knight y Genshin Impact, la partida de Riccitiello aumenta la sensación de incertidumbre que rodea a la plataforma mientras se proyecta hacia el futuro.