Ubisoft ha confirmado que Assassin’s Creed Shadows, la próxima entrega de la popular saga, ofrecerá una experiencia más enfocada y con un mapa más pequeño en comparación con sus predecesores. A diferencia de la inmensidad de Valhalla, que abarcaba tanto Noruega como Inglaterra, Shadows se concentrará en una región específica de Japón: Honshu.
Thierry Dansereau, director de arte del juego, ha explicado que esta decisión permitió al equipo de desarrollo crear un mundo más detallado y rico en experiencias, donde cada rincón tenga un significado especial. Al limitar el alcance geográfico, los desarrolladores pueden dedicar más tiempo y recursos a pulir los detalles y a crear una atmósfera más inmersiva.
“Estamos hablando de un tamaño similar al de Origins“, aseguró Dansereau en una reciente entrevista. Esto significa que los jugadores podrán explorar un mundo abierto de proporciones considerables, pero sin sentirse abrumados por la cantidad de contenido.
La decisión de centrarse en Honshu también permitirá a Ubisoft profundizar en la historia y la cultura japonesa. Dansereau explicó que la decisión de reducir el tamaño del mundo abierto se tomó para poder enfocarse en una región específica de Japón, Honshu, donde tienen lugar todos los eventos relacionados con Oda Nobunaga. Esto significa que los jugadores podrán explorar un mundo más detallado y con una mayor concentración de contenido.
Assassin’s Creed Shadows promete ofrecer una experiencia más íntima y enfocada que sus predecesores. Al reducir el tamaño del mundo abierto y concentrarse en una región específica, Ubisoft busca crear un juego más detallado y con una mayor sensación de inmersión, según Ubisoft.