El icónico actor, Arnold Schwarzenegger, ha dicho adiós a uno de sus papeles más emblemáticos: el cyborg asesino T-800 de la saga Terminator. A sus 75 años, la estrella de Hollywood pone fin a una trayectoria de casi cuatro décadas interpretando a este personaje que lo catapultó a la fama internacional.
La decisión de Schwarzenegger llega tras el lanzamiento de Terminator: Dark Fate, la última entrega de la franquicia que no logró el éxito esperado. El actor, además, ha expresado su descontento con la calidad de las últimas películas de la saga, indicando que «no estaban bien escritas«.
A pesar de su retiro del papel, Schwarzenegger asegura que la franquicia Terminator puede continuar sin él. «La saga no está acabada, pero yo sí«, ha declarado. «Recibí el mensaje alto y claro de que el mundo quiere seguir adelante con un tema diferente cuando se trata de Terminator. A alguien se le tiene que ocurrir una gran idea«.
La licencia Terminator, por su parte, parece tener buen futuro. James Cameron se encuentra trabajando en un reinicio de la saga, con un estilo más gore y cercano a la película original de 1984.
Sin duda, el adiós de Schwarzenegger al T-800 marca el final de una era, pero abre la puerta a nuevas posibilidades para la franquicia Terminator.